–The Killing
No creo, ni mucho menos, que este esté siendo un año malo o inferior en la tele estadounidense. El capítulo doble con que debutó The Killing, por ejemplo, fue francamente bueno. Redondo. Ecos de Twin Peaks, Mystic River o, incluso, Zodiac. El gatillo de la historia no es novedoso, pero sube muchos enteros gracias a su forma y su ambición psicológica. Ese Seattle gris e inquietante, un crimen con todas las líneas de investigación abiertas, actores punzantes (Mireille Enos es una especie de esfinge pelirroja y, por fin, un papel contenido para Michelle Forbes) y la impresión de que las cloacas de la ciudad empiezan a apestar. Muy, muy poderoso. Sin olvidar esos silencios que ya empiezan a ser marca de la casa AMC y esos demoledores montajes alternos del final de cada capítulo. El tercer episodio mantiene el listón y da ganas de catar el original danés. Necesito más tiempo para armar una crítica consistente pero, desde luego, hasta ahora The Killing ha sido una chuchería envenenada.
–Twenty Twelve
No me vendré arriba para catalogar esta última comedia de “joya”. Aún no. Solo he visto un capítulo y el teatrillo era más para sonreírse que para reírse a carcajada limpia. Además, como escribe el crítico Bowden, Twenty Twelve es una “sátira amable“, de las que no hacen sangre. Adopta la mirada de la caústica The Thick of It y centra la lupa en el día a día de una organización, en este caso un puñado de burócratas que están lanzando las Olimpiadas de Londres 2012… en un quiero y no puedo constante. Liderando este patético backstage encontramos a Hugh Boneville (el señor de Downton Abbey), que cambia de registro con solvencia y se adapta a un estilo que vuelve al falso documental, esta vez canónico, con la narración de David Tennant simulando una irónica objetividad. El piloto estuvo entretenido, pero uno echa en falta ese vitriolo Gervais que arrasa con todo lo que toca. Porque, desde luego, un escenario preolímpico da mucho, mucho juego.
-Noctívagos posmodernos y The Vampire Diaries
El pasado jueves presenté en Pamplona el libro que ha escrito Jorge Martínez Lucena: Vampiros y zombies posmodernos. La revolución de los hijos de la muerte (Ed. Gedisa). Podía fácilmente haberse titulado “Los vampiros son de Venus y los zombies son de Marte“, puesto que de eso va la cosa. Se trata de un ensayo ágil, polifacético, que combina el vuelo filosófico con la cercanía de la pop-culture. El libro detalla cómo los no-muertos (del mito de Frankenstein al de Drácula, pasando por la catarata zombie) han evolucionado desde sus orígenes hasta esta fiesta donde la posmodernidad resulta “especialmente corrosiva con las convenciones de la tradición”. Vamos, que ahora los vampiros ya no dan miedo, toman el sol alegremente y ni siquiera necesitan sangre humana… No, no, True Blood me sigue superando: demasiado moderna y muy aburrida; pero anuncio que en breve analizaré aquí mis paseos por Mystic Falls.
Crítico en Serie
El problema es que si ahora te pones a ver la The Killing original seguramente te decepcionarán sus recursos. Y si la terminas antes, perderás gran parte del interés en el remake americano. Los remakes en el fondo están hechos para quienes no han visto el original (creo yo, por supuesto).Y tengo curiosidad por leer tu opinión acerca de Vampire Diaries. ¿No nos puede dar un adelante? Una de dos: o te parecen infumables… o estás disfrutando como un enano con Elena, los Salvatore y la Brujilda de mirada torcida.
Nahum
Ja, sí, algo así escribí hace unos meses sobre los "remakes/adaptaciones". El que llega primero al espectador es el que gana. Sobre "The Vampire Diaries", bueno, me quedan 4 capítulos para acabar la primera temporada y ni un extremo ni otro. Tiene cosas adolescentes muy simpáticas pero no me ha terminado de cautivar. Ni amor total ni odio eterno. Necesito más carrete.
martinyfelix
La original de The Killing habrá que guardarla para cuando se acabe esta. Pero una vez vista una de las dos, la otra algo perderá irremediablemente.De Twenty Twelve comencé a ver el piloto pero ni fu ni fa y encima andaba más atenta a otras cosas, así que me la guardé. No tengo muy claro si acabaré viéndola.Ansiosa por leer tu crítica de TVD, justamente fue mi último macro de maratón seriéfilo. A mí me parece genialerrimo la cantidad de tramas, líos, muertes y culebrones que meten en tan poco tiempo, aunque realmente es todo una ida de olla muy grande.
Jimmy McNulty
The Killing me parece muy buena, pero me cogea un poco. Los policias y los padres de la chica son personajes muy interesantes, pero la trama del político no hay por donde pillarla. Además, a veces esta todo un poco trillado. Por suerte, tiene más virtudes que imperfecciones.Saludos.
Leticia Martínez
Yo tengo a the killing en la cola de las series que han salido nuevas y que quiero empezar a ver! tu crítica ha hecho que suba puntos, así que a ver si tengo un rato y me pongo con ella!!Un beso!