No sé muy bien cómo, pero ha pasado una cosa extraña: me he convertido en un “experto” en series turcas, esas que andan ahora tan de moda en España… y en medio mundo. Todo empezó hace unos meses, cuando el programa matinal de COPE, con el que colaborado muchas veces, me contactó como experto en series. Es una etiqueta que, sin falsa modestia, puedo colgarme sin pasar vergüenza. Pero la productora siguió: “Quiero que nos expliques el fenómeno de las series turcas, que están arrasando en el prime-time”. Ahí aparecía el muro. Glups. Ni pajolera idea.
En mi defensa he de decir que estudié el asunto. Me pasé todo un fin de semana visionando episodios de Mujer, Madre, Mi hija, Hercai, Fatmagul, Suleimán, El gran imperio otomano y alguna otra que ahora mismo no recuerdo. Y leí todo lo que pude al respecto, claro, intentando encontrar las diferencias con la soap-opera anglosajona y la telenovela hispana, formatos primos de la existosa dizi turca.
En marzo me hizo una simpática entrevista Carlos Herrera y fue Goyo, su colaborador, el que testó mis agujeros, ja.
De ahí, y con la ayuda del buscador de Google, hace una semana me contactaron desde Espejo Público, el veterano programa matinal que presenta Susanna Griso. “Buscábamos a un experto en series turcas…”. Ja. Querían promocionar Tierra Amarga, la nueva gallina de los huevos de oro. Y allí que fui. Ya me avisaron: no creo que los colaboradores te dejen hablar mucho. Oye: algo de cuchara ya metí. ¡El mundo de la televisión!
He recortado mi aparición y la he subido a este enlace de mi Google Drive, por si alguien quiere verme hablando de turcos guapos con Lucia Etxebarria. Más ja.
Flames
Jo, enhorabuena…….. habrá que ver la entrevista……. pero no creo que me acerque a las series turcas…..