Ya saben que de vez en cuando traigo por aquí las publicaciones académicas que uno va pariendo. En este caso, se trata de una reflexión sobre la especificidad de la temporalidad televisiva. Es un asunto que trabajé hace un par de años con el amigo Ted Nannicelli, un tipo extraordinario -humana e intelectualmente- que fue clave para mi estancia en Australia. El artículo ha tardado en publicarse puesto que no terminamos de dar con la revista adecuada a su temática. Pensamos que encajaría mejor en el ámbito de la estética y, finalmente, tenía más recorrido en la comunicación y los estudios televisivos. Así, hace unas semanas lo publicaba la revista Área Abierta bajo un título ambicioso: “Otro tipo de recompensa narrativa: el concepto de ‘prolongación temporal’ como superación de la serialidad televisiva”.
El artículo empieza citando un mítico episodio de Community y acaba refiriéndose a otro legendario de Buffy, alude a presentadores de televisión como Johnny Carson, Bill Maher o Tucker Carlson, dedica una sección al programa de cocina liderado por Gordon Ramsay, cita varios programas de telerrealidad y alude a comedias como How I Met Your Mother, Friends o Seinfeld. Todo para acabar hablando del tiempo, jeje.
Como siempre, se puede descargar en acceso abierto en la propia revista, en academia.edu o en Researchgate. Por si alguien quiere saber más de qué va el asunto, acá les copio el resumen:
Este artículo explora las características de la temporalidad en la televisión; en concreto, las capacidades estéticas propias que la pequeña pantalla tiene a su disposición en virtud de su temporalidad distintiva. Partiendo de una metodología que combina los estudios sobre serialidad que han proliferado tanto en los Television Studies como en la Filosofía de la Estética, este texto apunta, en primer lugar, cómo las nociones existentes de “serialidad” no ofrecen una descripción completamente adecuada del particular carácter temporal de la televisión y de sus capacidades estéticas. Por esta razón, se propone un nuevo concepto: la “prolongación temporal”. Esta abarca, a diferencia del concepto de serialidad, tanto la manera específica en la que el medio televisivo emplea la temporalidad, así como los efectos estéticos que este manejo genera en formatos y géneros tan diversos como interminables soap-operas, dramas seriales con arcos argumentales horizontales, procedimentales episódicos, comedias de situación, telediarios, emisiones deportivas, concursos semanales, telerrealidad e, incluso, documentales. Para respaldar nuestra argumentación, el artículo profundiza en tres casos de estudio que apuntalan la validez de nuestra teoría. En primer lugar, se abordan las series de ficción autoconclusivas, de las que se espiga el funcionamiento de la prolongación temporal en los gags recurrentes, en la estructura del monstruo de la semana y en la ruptura que suponen los “episodios especiales”. El segundo caso de estudio es la figura del presentador de televisión informativa, donde el concepto de familiaridad establece unas recompensas estéticas privativas gracias al paso del tiempo. El último caso que se examina es el de programas de telerrealidad, con Kitchen Nightmares como botón de muestra, donde las variaciones en las expectativas son esenciales para establecer una comparación fructífera con episodios anteriores.
María Alejandra Riego
Excelente